Buena Vida
Foto: Cortesía
La patilla , llamada también sandía o melón de agu a, es una fruta muy jugosa e ideal para consumirla durante épocas calurosas o en regiones de clima tropical, debido a que está constituida en un 90% por agua.
La sandía de la cual existen más de 850 especies, la podemos encontrar con forma redonda u ovalada, y su corteza puede ser verde oscuro, verde claro, o con rayas verde oscuro y verde claro.
Esta refrescante fruta contiene diversas vitaminas como la A, E, B1, B6 y vitamina C en mayor cantidad que una naranja, ayudando a la formación de colágeno lo cual permite mantener la piel joven.
Debido a su alto contenido de agua aumenta la secreción de orina, ayudando a limpiar las vías urinarias, al mismo tiempo que permite eliminar impurezas a través de la orina y evita los problemas renales. Por esta razón es recomendable para las personas obesas, personas que sufran de retención de líquidos, para hipertensos y para aquellos que sufran problemas renales o con las vías urinarias.
También ayuda a eliminar mucosidades, previene enfermedades infecciosas, y al ser antioxidante previene problemas cardiovasculares y degenerativos, logrando reducir el riesgo de padecer cáncer. De igual forma tiene efectos antirreumáticos, ya que ayuda a eliminar los ácidos acumulados en el organismo. Y gracias a su contenido de fibra ayuda a limpiar los intestinos.
Además, tiene minerales y enzimas como: potasio, magnesio, fosforo, sodio, calcio y hierro, los cuales colaboran en distintos procesos del cuerpo.
Su jugo al ser mineralizante es beneficioso para aquellas personas que tengan fiebre, ya que aporta sustancias nutritivas al mismo tiempo que refresca.
Para aquellas personas que tengan una dieta donde hay que reducir las calorías, la patilla es la fruta idónea, ya que sólo tiene 20 calorías por cada 100 gr.
Sin embargo, pese a todos sus beneficios y propiedades, esta fruta es rica en fructuosa (azúcar) por lo tanto no debe ser consumida en gran cantidad por personas que sufran de diabetes. (No obstante consulte a su médico para mayor información sobre su dieta, ya que es él indicado para sugerirle si comerla o no y en que cantidad).
Es importante que no la consuma justo después de la comida, porque diluye los jugos gástricos haciendo lenta la digestión. Pero puede ser consumida como parte del desayuno o en la merienda.
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